Haciendo deberes (III)

Y una vez que regresó... y leyó todo lo realizado... y los deberes escritos... quedaba por saber... los resultados.

El resultado de los deberes prácticos... fue que... no los había realizado... de forma estricta... y por tanto... tendré un castigo... cuándo... dónde... y como Él decida.

Entre los dos viajes... Él había podido leer mis primeros correos... y por tanto... ya sabía... que no los estaba realizando... tal cual me había indicado... y no dijo nada.

Le pregunté... porqué no me lo había dicho... cuando de todas formas... el castigo... ya me lo había ganado.

Su respuesta fue... una fuerte y divertida risa... "tu iniciativa me gustaba... pero vuelvo a recordarte... que no hiciste las cosas... exactamente... como Yo te había dicho".

Reí con Él... ¿cómo no hacerlo?... tenía razón... en las dos cosas.

Lo "peor" llegó... con los ejercicios escritos.

El primero... me costó muchísimo.

Cierto que... a estas alturas... no puedo negar que... me gusta escribir... sobre todo para Él... y que disfruto... rememorando los encuentros... cuando los plasmo en forma de relatos... pero este primero... me costó.

Por un lado... tenía que desarrollar... una escena imaginaria... de algo que... nunca he echo... por lo que no tengo ninguna experiencia... que no forma... ni ha formado nunca parte... de mis fantasías... y además me provoca... un profundo desasosiego.

Por otro lado... aunque el contenido era... obviamente... D/s... yo soy sumisa... y no Dominante... por lo que... no puedo pensar como Él... ni desarrollar las escenas... como lo haría Él.

Teniendo todo esto en cuenta... el relato... le pareció flojo... ligth... y me mandó... deberes complementarios

El segundo ejercicio escrito... si bien me llevó mucho tiempo... por su extensión... me resultó más fácil... ya que... contaba para realizarlo... con la experiencia de otras situaciones similares... ya que se trataba de desarrollar... desde mi punto de vista... como podrían ser... nuestras próximas vacaciones... con elección de lugar inclusive.

Si bien... el sitio elegido por mí... no es factible... teniendo en cuenta que... las escenas que desarrollo... son fáciles de trasladar... a otra ubicación geográfica... sí que ha sido de su agrado... independientemente de que... las escenas... se produzcan... o no... y sean como yo las he imaginado... o con los ingredientes que... como es natural... llevarán el sello de mi Amo.

El tercer ejercicio... debía de haber sido fácil... y mucho más corto... pero después de los dos anteriores... y sabiendo ya... la opinión que le había producido el primero... y con las neuronas ya algo agotadas... de tanto escribir... se me hizo cuesta arriba... y me llenó de dudas.

Si lo simplificaba... seguramente me diría... que no me había esmerado... ni estrujado el cerebro.

Si lo complicaba... seguramente me diría... que era mucho más sencillo.

Lo mirara como lo mirara... no sabía... qué era... lo que deseaba... y en ese sentido... fue mi escrito.

Escrito que le hizo reir... precisamente por eso... por la forma... en que me había complicado yo sola... las cosas.

Pero... ¿cómo no me las iba a complicar... conociéndole??????.

Y llegó... el ejercicio complementario... y me llevó horas... rellenar un cuestionario... de cuatro columnas.

Y se lo envié inquieta... a las tantas de la madrugada... e inquieta pasé... las pocas horas que dormí esa noche.

No conseguí relajarme... hasta que me llamó por teléfono... y entre risas... me contó lo mucho que se había reído... leyéndome.

Y me sentí feliz... por su risa... y por haber sido yo... (o mejor dicho... mi escrito)... el que se lo provocara.

Y hasta aquí... esta serie... de deberes realizados... durante su ausencia.

Si volveré a tener... o no... en sucesivos viajes... sólo Él lo sabe.