Como ausente

Mientras Él trabaja... permanezco tumbada en el sofá... como ausente...

Ausente... mirando sin ver... lo que ponen en la tele... 



Sumida en mis propias reflexiones... a duras penas... contengo el deseo de acercarme a Él... de hacerle un masaje en Sus hombros cansados...

Las horas pasan... y el calor es pegajoso... ¿o será acaso... mis pensamientos calenturientos... los que me tienen con este desasosiego???.

Sin hacer apenas ruido... me meto en la ducha...



El agua resbala por mi piel desnuda... 



Con los ojos cerrados... recorro mi cuerpo... sintiendo su suavidad... e imaginando que... en cualquier momento... Él puede aparecer... reclamando lo que es Suyo.

Es evidente que... el agua... tan solo refresca mi piel... pero no calma el ardor interno que siento.

Prescindo de las braguitas... debajo del corto vestido que me he puesto.



De nuevo... me tumbo en el sofá... silenciosa... sintiendo Su presencia... Su cercanía...

Como ausente... mis manos se deslizan por mi cuerpo... prestando especial atención... a mis pezones duros... que provocativos... se marcan por debajo del vestido... reclamando atención.

Mis caricias... mis pellizcos... no son suficientes...

Un gemido de frustración se me escapa... y me hace levantarme... impulsiva... 

Mi deseo... es acercarme a Él... pero sé que no puedo... no debo... así que... me dirijo a la mesilla de noche... saco dos pinzas de presión... y me las coloco en los pezones.



Uffffffffffffff... se me había olvidado... cuánto dolían...



Por un segundo... la tentación de aflojarlas... es grande... pero la excitación es mayor... 



Hoy me siento perra... muy perra... Su perra... y todo me parece poco...



Lubrico mi culito... meto dos dedos... lo abro un poco... antes de meter... un plug anal...



Ummmmmmmmmmmmm... ¡el placer es intenso!!!... pero no tanto como... si fueran Sus dedos los que urgaran en él... o Su polla follándome...



Le deseo... sí... deseo que me someta... que me domine... que me sodomice... que me use como mejor le plazca...



No puedo parar... ni siquiera... cuando el primer orgasmo me sacude...



Ni con el segundo...



De reojo... veo que Él sigue trabajando...



No quiero molestarle... aunque quisiera que...



Me sumerjo entre las brumas de mis deseos... y pierdo la noción del tiempo.

Adormilada... me incorporo sobresaltada... cuando Él pasa a mi lado... rozándoMe apenas... y susurrándoMe que ya terminó... y que se va a la cama.

Le sigo en silencio... esa noche... velaré Su sueño... aunque sólo sea... en mis sueños...